viernes, 28 de noviembre de 2014

Corrige el manejo de 12 de tus desechos (Parte 2)

Por: Gicela Moreno


Nuevamente los desechos…consecuencia inmediata de nuestro consumo y de nuestras actividades. Consumo y actividades donde lo único que parece interesarnos son los beneficios materiales, económicos y de confort que podemos obtener, pero donde el destino de los subproductos resultantes o desechos pareciera no  preocuparnos en lo más mínimo (y es justamente en lo que menos pensamos), cuando realmente tendríamos que hacernos una  pregunta obligada ¿qué voy a hacer con los desperdicios que resulten de lo que haga o de lo que consuma? En esta segunda parte retomaremos las sugerencias sobre el cómo manejar mejor los otros 6 desechos restantes que generamos.

Imagen: Escombro en la vía pública


7.-Escombros.  Es este uno de los desechos más problemáticos que generamos las sociedades urbanas. Cada que hacemos una reparación, una modificación o una construcción nueva, al final desechamos un coctel de desperdicios que van desde alambres, pedacería de fierro, bolsas de cal, cemento y pegazulejo, pedacería de ladrillo, de concreto, de pisos, de mosaicos, etcétera. Todo este coctel, en el colmo de la inconsciencia, es tirado en áreas verdes, barrancas, orillas de caminos etcétera, sin que pareciera que a nadie le preocupara la gravedad de este problema y el pésimo aspecto que esto causa.  Parte de la solución sería que las autoridades correspondientes vigilaran celosamente el destino de los escombros de quienes construyan, creando para el efecto un gran centro de acopio. Con el escombro se pueden rellenar calles de terracería (retirando lo que es basura y dejando solo los agregados), igualmente pueden hacerse ecoladrillos (rellenando botellas de pet con escombro triturado) con los cuales pueden construirse casas ecológicas; además de que se pueden rescatar ladrillos, mosaicos y otros materiales útiles que aún puedan reusarse. Investigar el posible reprocesamiento a nivel industrial de estos desperdicios es una veta de oro desaprovechada.

8.- Conos de huevo.  Cuántos cartones usados para embalar los huevos que se producen en las granjas vemos en las calles tirados, aplastados, despedazados y revueltos con infinidad de desechos. Este material es factible de poderse reciclar, extrañamente en los centros de acopio es rechazado, desconociendo las razones de esto. Sin embargo los ciudadanos estamos desperdiciando un material que con un tratamiento adecuado hasta nos serviría para construir muebles, o accesorios contra el calor de los techos de concreto, o hasta estructuras para  hacer casas, en lugar de tirar o quemar irresponsablemente este desecho.

Imagen: cachorros de perro

9.- Heces de mascotas. Otro problema constante,  producto de la falta de responsabilidad de quienes gustan de tener mascotas pero que dejan sus desperdicios en la vía pública o los revuelven con los desechos no aprovechables (la basura), es el de las heces de los animales. Estos desperdicios deben ser recogidos por el dueño del animal, juntarlos y confinarlos en depósitos cerrados y canalizarlos al destino que fijen las autoridades correspondientes, quienes a su vez deberían tener un destino final bien previsto. En las áreas rurales las heces de los animales pueden ser enterradas para su descomposición, sirviendo de abono a las plantas. En las áreas urbanas, si se almacenan y confinan estos desechos y se siguen las técnicas apropiadas, pueden convertirse en composta, logrando así un producto benéfico para nuestras huertas urbanas y se elimina un problema desagradable y contaminante. Algo muy importante ¡¡No revuelvas las heces o excrementos de animales con la basura que entregas al camión recolector!!

10.- Aserrín. El corte, despiece y moldeado de las piezas de madera, que se hace con todo tipo de sierras y navajas, deja un subproducto en apariencia inofensivo: el aserrín. Por lo general, al igual que otros desechos de la construcción, el aserrín se tira en los basureros, en las orillas  de los caminos, en las áreas verdes, en las barrancas, etcétera, revuelto con sacos, estopas y demás basura, mismos que, aparte del mal aspecto, son un material propicio para que gente sin escrúpulos provoque quemas irresponsables muy contaminantes del aire. El aserrín limpio, que puede tener muchos usos como servir de cobertura a las plantas para guardar la humedad, puede convertirse en composta, puede utilizarse para formar bloques combustibles (en lugar de cortar leña del campo), y más aún, puede utilizarse industrialmente para fabricar madera comprimida. Formas de aprovechar este residuo hay muchas. 

Imagen: acopio de botellas

11.-Vidrio. Es otro desecho que se tira en cualquier lugar y se revuelve con todo tipo de desperdicios sin ninguna consideración. El vidrio es un material peligroso para los niños pequeños y aún para las personas adultas, ya que el riesgo de cortarse es siempre latente. El vidrio es un material estable e ideal para el envasado de diferentes sustancias, por lo que es muy utilizado. En muchas ciudades existen empresas y lugares donde se recibe y acopia el vidrio para proceder a su reciclaje a nivel industrial, por lo que No hay pretexto para tirarlo como basura. Se recomienda separarlo bien limpio y canalizarlo a los centros de acopio.
A nivel casero bien pueden aprovecharse espejos y botellas de vidrio para hacer utensilios, artesanías, juguetes, antorchas, vasos, etcétera.

12.- Desechos plásticos y fibra de vidrio de autos. El uso de diferentes tipos de plástico se ha popularizado enormemente para la fabricación de toda clase de piezas y moldes,tales  como las usadas en la industria automotriz, donde junto a otros materiales como la fibra de vidrio, dan vida a puertas, facias o defensas, parrillas, ceniceros, molduras de acabados, tanques de combustibles, etcétera. Un porcentaje de todas estas autopartes se recupera y se vende para su re-uso en los llamados deshuesaderos o yunques, pero existe una gran cantidad que se tira y abandona sin pena alguna en las orillas de caminos, en las áreas verdes y hasta en los ríos y lagunas (claro, revuelto con basura y aceites). Las empresas dedicadas a la fabricación de piezas con estos materiales deberían hacer un esfuerzo para recuperarlos y someterlos a nuevos procesos de fábrica, a fin de ayudar a su reciclaje. El ciudadano común lo único que puede hacer es evitar tirarlo en la vía publica y retirar los que vea, y con un poco de ingenio, puede ayudar a darle un segundo uso, por ejemplo usando las defensas como cerco para un gallinero o huerto, o pulverizar estos plásticos para hacer pastas aplicables a diferentes usos. 

Imagen: partes de auto

No hay comentarios:

Publicar un comentario